El asunto ha tomado aires de película de acción, los medios de comunicación se encargaron de informarlo al mundo entero. Sería algo como: Nuestro héroe se encontraba en su puesto de trabajo habitual cuando escuchó un murmullo creciente en las afueras de la repostería. Quizo indagar de que se trataba y le informaron que el presidente de los E.U.A. había llegado al local y a él, Richard Cruz, también conocido como "Moreno," le tocaría preparar el sándwich medianoche que Obama consumiría aquella tarde.
Ese simple detalle ha hecho conocer todos los demás puntos sobre la vida de Richard. Es dominicano, ¿por qué no me sorprende?, estudió en UTESA pero no terminó la carrera de medicina que inició en su natal Santiago. Como decimos en R.D. le llegaron los papeles de residencia y se marchó a Borinquen. Su mujer tiene siete meses de embarazo y Richard está listo para volver a la universidad para reiniciar sus estudios de medicina.
También salió a relucir que Richard es de Gurabo y su familia vive al lado de la familia del expresidente dominicano Hipólito Mejía. Todo por un medianoche.
Siempre he sido muy optimista y me agrada ver el lado bueno de las cosas. Bueno, está bien que Richard se haya hecho popular por un medianoche y que todos sus amigos, como él mismo dijo, lo estén llamando constantemente para preguntarle por el suceso. Pero, no dejo de pensar que este joven dominicano interrumpió su carrera de medicina hace cinco años y que labora en Puerto Rico haciendo sándwiches cuando hace un par de años debió estar ejerciendo la medicina.
Quiero que llegue el día en que los jóvenes dominicanos vean el prepararse profesionalmente como una opción de mejorar sus vidas en nuestra tierra. Quiero que llegue el día en que ya nuestros jóvenes no vean una tarjeta de residencia como una tabla salvavidas y tengamos una República Dominicana repleta de profesionales dispuestos a echar la batalla por nuestra nación.
Ese día seré inmensamente feliz.
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