Quizás algunos fanáticos religiosos me acusen de sacrílego por lo que voy a expresar a continuación. Hoy es miércoles de ceniza, lo celebran los católicos, también es inicio de cuaresma… Hasta ahí vamos bien.
Lo que pasa es que estos días de cuaresma; que no se come carne, que en la iglesia católica te hacen una cruz con ceniza, que los creyentes se preparan para la conmemoración de la muerte y resurrección de Cristo y uno que otro detallito más que conforma esta época del año.
Pero no puedo negarlo, lo que más me gusta de estos días es la habichuela con dulce.¡Ay sí! Cuando yo era chiquito hacía una "recogida para foni uno," pasaba por donde la madrina, un par de mis tías y a veces hasta la vecina se iba en la agenda. Todo para comer habichuela con dulce la cuaresma completita.
En casa guayábamos el coco, se preparaba con leche, habichuelas rojas, pasas, batata, clavo dulce, canela, y galletitas a la hora de servir. Todo en una olla bien grande, para poder compartir con vecinos y visitantes.
Algunas tradiciones han cambiado o variado, pero las habichuelas siguen reinando en esta temporada. Aunque ya no se prepara tanta cantidad como antes. Hoy muchos compran el coco enlatado, o desbaratan las habichuelas (a mí me gustan graneadas), pero al final siempre comemos habichuelas con dulce en cuaresma y en especial en Semana Santa.
Es parte de nuestra dominicanidad.
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